Durante la semana pasada, en el rincón de arte, hemos estado haciendo una sencilla manualidad aprovechando el paisaje otoñal que tenemos en nuestro entorno.
Para ello, previamente en el patio, hemos observado el ambiente que había (los colores predominantes en esta estación) y hemos jugado con todas las hojas caídas en el suelo, experimentando así con nuestros sentidos: las hemos tocado, olido, pisado...
pero sobre todo...
¡nos lo hemos pasado genial lanzándolas al aire y tirándonoslas unos a otros por encima!
¡La naturaleza y sus diferentes elementos aportan muchos beneficios en los peques y debemos aprovecharlo!
Ya en clase, empezamos creando nuestro propio árbol de otoño pintando nuestra palma de la mano con témpera marrón y después estampándola sobre una cartulina.
Después, dibujamos el tronco con el pincel
y por último, decoramos en el árbol las hojas utilizando corchos y estampándolos en los colores del otoño (amarillo, rojo, marrón y naranja). Muchas de ellas las colocamos sobre las ramas, algunas que otras volando y otras caídas por el suelo.
Aquí os dejo algunos ejemplos con troncos más anchos, más estrechos, con muchas o pocas hojas...
¡Nos han quedado preciosos!🍁🍂
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