Os sigo contando cositas que hacemos para volver a la calma después de regresar del patio y hoy es el turno de un juego que les encanta a mis peques y que nos gusta mucho hacer al que he llamado
"la campana silenciosa" y consiste en lo siguiente:
Nos sentamos en el suelo todos en círculo, al centro sale un niñ@ al cual le tapo los ojos con una venda y le dejo detrás de su espalda una campana (la muevo y la hago sonar para que se cerciore de que está).
Otro niñ@, a mi señal (sólo haciendo un gesto), debe salir a coger la campana intentando hacer el menor ruido posible
para escondérsela detrás de su espalda.
Una vez, que ha "robado" la campana y ya está de nuevo sentado en su sitio como el resto de compañeros, le quitamos al compañero la venda de los ojos y deberá de adivinar, utilizando para ello sólo el sentido del oído, por donde cree que se ha podido ir la campana y quien se la ha escondido.
Contará con 5 oportunidades para tratar de adivinar quien la tiene y si no lo adivina, le vamos dando pistas.
Es un juego muy divertido, que cada vez, les resulta más difícil de adivinar quien puede tenerla ya que se esfuerzan mucho en hacerlo muy bien y hacer el mínimo ruido para que no sean descubiertos.
Todos quieren salir a hacerlo asi que cada vez que lo hacemos lo repetimos 3 veces, siempre intentando que poco a poco puedan participar todos.
Durante toda la actividad es necesario estar en absoluto silencio y sobre todo no mirar para no delatar a quien se ha llevado la campana, algo que a veces nos cuesta mucho y no podemos evitar jeje.
Después, una vez finalizado el juego, aprovechamos también a pasarnos entre todos la campana intentando que no suene.
Con esta actividad, se crea un ambiente muy relajado, de mucha expectación y concentración con el que volvemos a la calma y además, entrenamos y ponemos a prueba nuestro sentido del oído.
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